Actualmente, hay muchos estudios que dicen que tanto los niños como los adolescentes llegan a dedicar más de seis horas al día a actividades ociosas de carácter sedentario como mirar la televisión, el ordenador, navegar, chatear o utilizar en exceso el móvil o Tablet.
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Vivir en la era de las comunicaciones es hacerlo en un lugar donde todo el mundo quiere estar conectado, tanto niños como mayores. El ocio online ha crecido y debemos no solo ser conscientes de los peligros, también de las ventajas. Existe gente que se equivoca al pensar que las salas de bingo online sean una estafa por sí mismas, por ejemplo. La verdad es que, si se confía en una buena sala, podemos tener las mismas ventajas o más que en cualquier sala física.
Esto también es extrapolable, a los videojuegos o incluso al cine. ¿Merece la pena ir a jugar a un salón de videojuegos o ir al cine? Pues sí, pero también se pasa un buen rato viéndolo cómodamente en casa. Lo más recomendable es que haya un equilibrio entre las dos alternativas.
Si se va a la definición utilizada por la Real Academia Española de la Lengua (RAE) de “Ocio”, hay cuatro definiciones que irían en este orden:
• Cesé del trabajo, inacción u omisión de actividad
• Tiempo libre con el que cuenta una persona
• Diversión o una ocupación en reposo
• Obra de ingenio que alguien realiza en los tiempos en que les dejan libres sus otras ocupaciones
Entre los problemas más grandes que tuvo el siglo XX y que se han ido agrandando en este nuevo siglo es el impacto de las nuevas tecnologías en nuestro tiempo libre.
Ahora el hombre se ve sometido a un empleo no intensivo de la fuerza de trabajo, por lo que esto provoca otras consecuencias al producirse otra clase de comportamientos sociales nuevos.
Estos impactos que se produjeron en el siglo XX obedecieron a la velocidad que tuvieron tanto la tecnología como los factores sociales. Todo ha dado el resultado de los grandes cambios en la vida del hombre y su vida doméstica hasta límites que no se imaginaban hace medio siglo.
Está claro que, aunque el hombre ahora tiene más tiempo libre, la calidad de este tiempo se ve afectada por las nuevas tecnologías. Por ejemplo, es común estar viendo la televisión mientras se miran el ordenador y el móvil. Esto implica que el nivel de atención que se puede dedicar a cada medio es reducido, por lo tanto, una actividad que puede ser enriquecedora como leer o ver la televisión, pierde parte de su riqueza.
¿Qué es la educación para el ocio?
Educar para el ocio es hacer que el ocio y el tiempo libre sean un instrumento para el enriquecimiento y el desarrollo de la persona. Una cuestión de todos. Hay que ser conscientes de que la educación no solo es sacar buenas notas, también despertar en los niños y jóvenes su fantasía, creatividad e imaginación, así como la responsabilidad.
En los mayores, también un mal uso de las tecnologías puede hacer que se encierren en ellos mismos, en las paredes del hogar. Todo esto, cuando no se tiene en cuenta, lo que hace es aumentar las relaciones negativas.
A diario, mucha gente se pasa horas sentado al ordenador, navegando por la red, hablando por por el móvil, etc. Todo esto no está reñido con salir con las amistades o con hacer deporte. Antes de optar por tal o cual herramienta, hay que pensar en los objetivos que tiene lo que estamos haciendo y la forma en que dicha herramienta tecnológica nos ayuda a hacerlo realidad.
Los beneficios de las nuevas tecnologías son incuestionables y podemos verlas en las TICs que ejercen frecuentemente un papel de lo más motivador entre los niños y los adolescentes.
El planeta está ante unos avances tecnológicos que han “golpeado” a estas generaciones del mundo actual, y que seguirán haciendolo en generaciones futuras. No hay que olvidarse del deporte, de pasear, pero hay que llegar a un equilibrio entre la utilización tecnológica para el tiempo libre y una vida social sana fuera del entorno digital.
El abusar de estos avances tecnológicos, puede llegar a causar problemas psicológicos de gravedad y dependencias que nadie desea, por lo que la labor de concienciación es obligatoria, no solo por la administración, también por los amigos y la familia. Las nuevas tecnologías son buenas para el hombre, pero abusar de ellas, como todo en la vida, es malo.